Estanys d’Empordà
La recuperación de los antiguos paisajes lacustres del Empordà
Los estanques históricos del Empordà
El Empordà se encontraba cubierto hasta la edad media por cientos de lagos y lagunas. Los siglos posteriores sufrieron un proceso implacable de drenaje y desecación hasta unas pocas lagunas litorales.
Se calcula que los antiguos estanques cubrían una superficie superior a las 2.800 ha.
Los estanques actuales
En la actualidad se conservan sólo las lagunas litorales, unos pocos humedales protegidos y restaurados en los Parques de los Aiguamolls y del Baix Ter, unas balsas temporales en la Albera fuertemente afectadas por obras de drenaje y los restos del estanque de Riumors que se inunda cuando la acequia Sirvent sube de nivel.
Los grandes estanques de Siurana, Vilacolum, Bellcaire y Ullastret han perdido totalmente su carácter de zona húmeda.
Los restos de los antiguos estanques más los humedales de nueva creación suman unas 430 Ha. Solo un 15% de la superficie original.
En el sector de Siurana estaba el antiguo estanque de la Closa Gran.
La Closa Gran antiguamente debería tener una profundidad de 4 metros en época húmeda. (Recreación virtual).
Algunos de estos estanques ampurdaneses todavía se inundan en ocasiones de los grandes temporales de levante, como el lago de Vilacolum en diciembre del 2014
Otros estanques todavía se inundan cuando las acequias de drenaje suben de nivel, como el antiguo estanque de Riumors
¿Por qué necesitamos recuperar estanques?
Los estanques y zonas húmedas son ecosistemas de mucha biodiversidad, a menudo amenazada, y nos aportan funciones y servicios ecosistémicos como son:
- Regulación del agua : Actúan como esponjas naturales, absorbiendo las lluvias y liberando agua de forma gradual a ríos y acuíferos. Esto ayuda a moderar los flujos de agua, reduciendo los efectos de las inundaciones y sequías.
- Depuración del agua : Filtrando los contaminantes y las partículas, las zonas húmedas mejoran la calidad del agua. Las plantas y microorganismos presentes en estos ecosistemas descomponen y eliminan sustancias contaminantes como nutrientes excesivos, metales pesados y otras toxinas.
- Apoyo a la biodiversidad : Las zonas húmedas proporcionan hábitat para una gran variedad de especies de plantas y animales, incluyendo muchas especies amenazadas y en peligro de extinción. Son especialmente importantes como áreas de descanso y alimentación para muchas especies de aves migratorias.
- Almacenamiento de carbono : Son importantes sumideros de carbono, capturando CO2 de la atmósfera y almacenándolo en vegetación y suelos, ayudando así a mitigar el cambio climático.
- Apoyo a las comunidades humanas : Muchas comunidades humanas dependen de las zonas húmedas para su subsistencia, incluyendo la agricultura, la pesca, el turismo y la obtención de agua dulce.
- Recreación y turismo : Ofrecen espacios únicos para el ocio, la educación ambiental y el turismo ecológico, contribuyendo a la economía local y al bienestar humano.
Los estanques de futuro
La recuperación de estos estanques es posible con la eliminación de los drenajes de los lagos de la Albera, la gestión del agua de las importantes fuentes de la zona de Siurana y sus estanques, la gestión de la acequia Sirvent, el río Fluvià y el río Daró o la creación de salinas litorales.
La nueva directiva de restauración de hábitats y los programas mundiales y europeos 30×30 para proteger el 30% de los espacios naturales en 2030 nos deben llevar a una colaboración de la iniciativa privada y las administraciones públicas para recuperar como mínimo 450 hectáreas de nuevos estanques en el Empordà .